viernes, 27 de noviembre de 2015

Presidente SI, Transición NO




Ya con el hecho consumado, Macri es el nuevo presidente, lo que en consecuencia sera el traslado del mando presidencial a manos de Mauricio Macri. Pero como siempre ha caracterizado al gobierno de Cristina no se puede ir tranquila, facilitando la transición al líder de CAMBIEMOS, si no que se tiene que ir y marchar con varias polémicas antes de terminar su mandato. Lo mezquino exhibida por la actual jefa del Estado en su fugaz encuentro con Macri, del que ni siquiera quedó un registro fotográfico, y su actitud reticente a colaborar en la transición fueron cediendo a medida que quedaron en evidencia ante la opinión pública y comenzó a advertirse cierto aislamiento de la Presidenta hasta dentro de su propio gabinete. No pocos fantasmas comenzaron a sobrevolar la memoria de los argentinos. Desde una recordada frase de Máximo Kirchner -"entregaremos el gobierno, pero no el poder"- hasta la extendida creencia de que el que gana gobierna y el que pierde ayuda, a excepción del peronismo, que cuando pierde no ayuda sino que conspira.

 "LA PRESIDENTE DEJÓ EN CLARO QUE SUS MANDADOS NO IBAN A COLABORAR EN LA TRANSICIÓN Y, MUCHO MENOS, EN REVELAR LAS CIFRAS DE LA ECONOMÍA"



Una de las  si bien no lo dijo literalmente se nota en todas sus actitudes polémicas son las 90 leyes que se aprobaron antes del mandato, si leyeron bien, 90 leyes votadas en muy poco tiempo. Cuando a las 18.24 el tucumano Isaac Bromberg, primo del gobernador José Alperovich, se sentó en su banca, el bloque del Frente para la Victoria consiguió el número mágico de 129 legisladores presentes para alcanzar el quórum y, en la sesión especial de Diputados, avanzar con la aprobación de más de 90 proyectos de ley, a días de dejar el poder. Es que la orden de “defender los logros” que les bajó el miércoles Cristina a los diputados oficialistas en la reunión que tuvieron en la Quinta de Olivos, no fue cumplida a rajatabla.Con todo, el oficialismo buscó el aporte de sectores de la oposición para conseguir quórum. Pero el grueso del arco político opositor se opuso y dio una conferencia de prensa, donde apuntó contra el oficialismo por querer avanzar con el paquete de leyes a 7 días de que juren los nuevos legisladores.Ante el riesgo de que se cayera nuevamente, el bloque K pidió votar en dos grandes paquetes todas las leyes, algunos que, según la oposición, condicionarán al próximo Gobierno, como aquel que prevé que telefónicos y trabajadores de televisión participen de las ganancias empresarias. “Es un despropósito avanzar en temas trascendentes, como YCF, por el que habrá que poner $5.000 millones que no están en el Presupuesto que se votó”, se quejó el jefe del bloque de la UCR, Mario Negri, integrante de Cambiemos y uno de los interlocutores radicales con Macri. Esta claro que no estas medidas no le quieren hacer nada fácil la transición al nuevo gobierno, y que hay una orden directa de la presidenta de la nación que tampoco quiere hacerle nada facil a Mauricio Macri.


Otra de las polémicas que surgió es que la Campora, la agrupación que dirige el hijo de la Presidenta quieren controlar muchos mandos del estado, ya se pudo observar como hubo nombramientos apresurados para estas personas, como se han aprobado leyes sin discusión, y ahora también quieren controlar el serviciometeorológico nacional, desplazó a técnicos históricos que llevaban décadas en el organismo que se encarga de predecir el clima. Los integrantes de La Cámpora también “coparon”, desde hace varios meses, a ese ente históricamente técnico en el que trabajan civiles y militares. La agrupación K, según fuentes de Defensa, desplazó a las autoridades que llevaban años trabajando en el SMN. Los militantes “camporistas” que fueron contratados en el último tiempo allí, con salarios altos, son muchos más de un centenar, es decir, el más del 10 por ciento de una plantilla que tuvo tradicionalmente alrededor de mil empleados. El nuevo gobierno de Mauricio Macri prometió rever las contrataciones de último momento de militantes K en el Estado. Si cumple ese objetivo, tendrá que inmiscuirse hasta en lo que pasó en el Servicio Meteorológico Nacional. El SMN es mucho más que el lugar desde nacen el pronóstico del clima que difunden los medios a diario. Es un organismo descentralizado, con financiamiento propio, dependiente desde el 2007 de la secretaria de Planeamiento del Ministerio de Defensa. Ese puesto lo ocupa un “camporista”, Santiago Rodríguez. Con ese desembarco, la agrupación K ganó influencia en la organización diaria de sectores que dependen de lo que ocurre en los cielos para desarrollarse: los productores agropecuarios, por ejemplo. Buena parte de ellos, para La Cámpora, son el enemigo.



 Lamentablemente en cualquier país normal, la transición tendría que ser en modos cordiales, en paz, para que el futuro presidente tenga todo lo mas claro posible para poder actuar en consecuencia, claro en un país normal, no en uno donde el organismo oficial de datos para el país miente sistemáticamente, donde hay muchísimos cargos oficialistas sospechados de "ñoquis", donde hay un vicepresidente imputado y una presidenta constantemente sospechada de negocios oscuros con empresas propias, algo claro que no ocurriría en un país "NORMAL".

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